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"Vuelve el Debate Sobre los Fármacos Para el TDAH: Cuestionado El Beneficio a Largo Plazo para los Niños” (por Shankar Vedantam)
Fuente: Washington Post / Fecha: 27 de marzo de 2009 / Categoría: Prensa general
La publicación de nuevos datos sobre un importante estudio de investigación (el citado anteriormente MTA) reabre el debate en torno a la efectividad a largo plazo del tratamiento de niños con trastorno por hiperactividad o déficit de atención, y ha provocado que algunos miembros del equipo investigador reconozcan que no hay evidencia de que la medicación haga demasiado después de los 24 meses de tratamiento. El estudio indica igualmente que el uso a largo plazo de esta medicación podría enlentecer el crecimiento de los niños. Estos últimos datos, dibujan un panorama bastante diferente al de los positivos resultados iniciales, que fueron conocidos en 1999. Uno de los investigadores principales del estudio, el psicólogo William Pelham, afirmó que la interpretación más obvia de los resultados es que la medicación es útil a corto plazo pero inefectiva en períodos más largos, pero añadió que sus colegas han tratado repetidamente de encontrar datos que indicaran que es útil a largo plazo y, cuando sus explicaciones no podían sostenerse, buscaban otras nuevas. “La postura del grupo investigador en el primer artículo publicado fue tan rotunda que después les dio reparo reconocer que se habían equivocado y esto nos ha confundido a todos”, dijo Pelham, de la Universidad de Nueva York, en Buffalo (EEUU). Pelham comentó que los fármacos, incluyendo Adderall (producto a base de sales anfetamínicas) y Concerta (metilfenidato de liberación prolongada), están entre las medicaciones más comúnmente prescritas a los niños americanos, y añadió: “Si el 5% de las familias del país les están dando un fármaco a sus hijos y no se dan cuenta de que no aporta beneficios a largo plazo y que incluso podría generar riesgos a largo plazo, ¿por qué no debe decírseles así de claramente?”
La falta de acuerdo ha producido una gran variedad de comentarios entre los investigadores acerca de cómo presentar correctamente los resultados a la opinión pública. Algunos se preguntan por qué los miembros del grupo investigador parecían estar mirando hacia otro lado para pasar por alto las posibles implicaciones de la medicación.
Peter Jensen, unos de los colegas de Pelham, respondió que el propio Pelham estaba condicionado contra el uso de estos fármacos y estaba asumiendo su opinión personal como ciencia. Jensen añadió que Pelham era el único miembro del equipo investigador que se quedó con el mensaje simplón de que el estudio arrojaba dudas sobre la utilidad a largo plazo de la medicación, aunque los mensajes y entrevistas posteriores han demostrado que no estaba solo.
El estudio MTA fue diseñado para probar si los niños diagnosticados de TDAH evolucionaban mejor cuando eran tratados con medicación, con medicación más psicoterapia, con psicoterapia solamente o con el cuidado médico habitual. Los fabricantes de la medicación distribuyeron miles de copias del artículo a los médicos en un momento en el que el diagnóstico de TDAH iba siendo cada vez más frecuente. Dado que los niños que tomaban únicamente medicación evolucionaron tan bien como aquellos que recibían los dos tratamientos a la vez, medicación y psicoterapia, el resultado del estudio se inclinó hacia la medicación.
En una segunda fase del estudio, los investigadores siguieron a los niños y compararon sus datos, pero los investigadores ya no asignaron aleatoriamente a los participantes a las distintas opciones de tratamiento, por lo que esta fase del estudio resultaba bastante menos rigurosa desde el punto de vista científico.
En agosto de 2007, los investigadores del MTA informaron de los primeros resultados del seguimiento, que por aquel entonces ya no mostraban diferencias en la conducta de los chicos que recibían medicación frente a los que no. Pero los datos sí mostraron que aquellos chicos que habían recibido medicación durante 36 semanas, eran algún centímetro más bajitos y unos kilos más delgados que los que no.
Un comunicado de prensa del Instituto Nacional de Salud Mental de los EEUU emitido al mismo tiempo, presentó los resultados de forma más favorable. El comunicado, fechado el 20 de julio de 2007, se tituló “La mejoría en la continuación del tratamiento para el TDAH se mantuvo en la mayoría de los chicos”. El comunicado ponía de manifiesto que las ventajas iniciales del tratamiento farmacológico ya no eran evidentes, pero era el propio Jensen quien aseveró que esto no quería decir que el tratamiento a largo plazo no fuera efectivo.
Jensen dijo “Estábamos sorprendidos por la mejoría en los síntomas y el funcionamiento en todos los grupos de tratamiento”. Y en lugar de de afirmar que el crecimiento de los niños con medicación se enlenteció, el comunicado vino a decir que los chicos que no tomaban medicación crecieron algo más.