La corrección alimentaria y el aporte de nutrientes esenciales (vit. min. ácidos grasos, etc), puede ser no solo una buena alternativa a los fármacos, sino el tratamiento básico a seguir junto a la terapia psicológica.

A continuación presentaré un resumen de algunos estudios relevantes y las conclusiones que nos pueden estimular a escoger este tipo de tratamientos.

Intolerancias alimentarias y aditivos:

Diferentes investigaciones han confirmado la relación que existe entre las intolerancias alimentarias y las dificultades de comportamiento y aprendizaje tanto en niños como en adultos. (Dr. Ben Feingold, especialista en alergias infantiles, del Centro Medico Kaiser-Permanente, de San Francisco – California), alegó que un régimen alimentario libre de alimentos que contengan aditivos y colorantes artificiales, podría mejorar sustancialmente el comportamiento del 50% de los niños con TDHA , dichas sustancias son tóxicas para algunos niños y producen trastornos en ciertas funciones del cerebro que afectan al comportamiento.

La corrección alimentaria está en descubrir cuales son los alimentos culpables que hay que eliminar o cuya ingesta hay que reducir drásticamente. Una forma de realizarlo es mediante la dieta de eliminación, en la cual se restringe el alimento sospechoso durante 2-4 semanas y luego se observan los resultados, se ha comprobado que los alimentos más comunes que se comportan como alergenos o provocan intolerancias alimentarias son: azúcar, aditivos alimentarios (conservantes, colorantes, edulcorantes), lácteos, trigo, levaduras, maíz, soja, huevo, chocolate, cítricos y alimentos ricos en salicilatos, manzanas, bayas, cerezas, uvas, naranja, té y tomate. Ref. The Nutrition Practioner, en The ONC Journal, vol. 2, julio de 2000.

Cuando se retiraron éstos ingredientes de los alimentos que comían los niños con TDHA muchos psiquiatras pudieron constatar que su comportamiento se normalizaba; esto presenta un gran problema, ya que alrededor del 90% de los alimentos que les gusta a los adolescentes contienen estos componentes.

Azucares y alimentos refinados:

En relación a la dieta, se ha constatado que los niños que muestran indicio de TDHA , como tensión, nerviosismo, fatiga, desequilibrio emocional, comportamiento incontrolable, irritabilidad, dificultades en la concentración podrían estar padeciendo una leve hipoglucemia (poca azúcar en la sangre), el funcionamiento del cerebro depende de un suministro constante de glucosa en la sangre, la hipoglucemia perjudica la eficiencia del cerebro y de ahí resultan muchos desordenes relacionados con el comportamiento. El fuerte deseo de consumir alimentos dulces y glúcidos refinados, como azucares escondidos en las comidas, pan o harinas refinadas ,dulces, postres, zumos embotellados, refrescos, cereales refinados en lugar de integrales ....puede ser indicios de que hay poca azúcar en la sangre. El resultado final es un nivel de glucosa en sangre no estable que sigue subidas pronunciadas, bajadas y rebotes ,algo dañino y adicto para el organismo.

La corrección alimentaria para contrarrestar la hipoglucemia consiste en eliminar todos los azucares y toda la repostería, sobre todo la industrial ya que estos son perjudiciales para quien padece de hipoglucemia porque al consumirlos hace que el azúcar en sangre aumente de manera rápida con lo que se libera demasiada insulina para contrarrestar dicho aumento y al poco rato vuelve a haber una brusca bajada de azúcar con la consiguiente demanda, creando un circulo vicios (Facultad de Medicina de Yale, y T.M. Jones, científico visitante de Australia, publicado en The New York Times, 1990).

Observaron que los niños que consumían productos ricos en azúcar, caramelos, dulces, bollería industrial, zumos azucarados con edulcorantes artificiales tenían mayor tendencia a padecer síntomas como ansiedad, irritabilidad y dificultad de concentración tras la ingesta de estos alimentos y por el contrario, si se eliminaban se producía una disminución impresionante de la hiperactividad y podían concentrarse mejor.

Los glúcidos refinados, tienen un nivel de zinc muy inferior al de los cereales integrales ya que el zinc se encuentra en el germen y el salvado de los cereales y se ha observado que niños con trastornos en el aprendizaje presentan bajos niveles de zinc (H.A. Shoeder, Losses of Vitamins and Trace Minerals Resulting from Processing and Preservation of Foods, 1971.)

Últimas investigaciones sugieren que las restricciones de azúcar si además, se combinan con un consumo mayor de proteínas, especialmente en el desayuno, los resultados son aún mejores ya que la ingesta de aminoácidos ayuda en loa producción de neurotransmisores como la serotonina o la dopamina fundamentales para el correcto equilibrio de las emociones y el comportamiento. (The Nutrition Practitioners, en The ONC, Journal, vol. 2, julio de 2000.)

Contaminación ambiental:

The Lancet, publicación medica de Gran Bretaña declara: “Parece que un aumento de los niveles de plomo en sangre por un período prolongado podría contribuir al daño cerebral mínimo que tal vez este presente en casos de síndrome de TDHA"

Por eso, la contaminación del medio ambiente, principalmente resultados de los gases que provienen de vehículos motorizados en zonas donde hay mucho tráfico, podría ser una causa del aumento de TDHA entre los niños de las ciudades.

Otros estudios también dicen que las amalgamas dentales de mercurio y los pesticidas presentes en las verduras y frutas y la toma de ciertos medicamentos podrían influir negativamente en niños con TDHA.

Los fluorescentes podría ser otro factor que puede influir negativamente en los niños con TDHA, un psiquiatra comprobó que al cambiar los accesorios de las luces donde estudian y viven los niños, de modo que incluyera el espectro natural de los rayos de luz y se les protegiera de los rayos X que suelen emitir los fluorescentes , la concentración de los niños mejoraba sustancialmente. Las investigaciones en este campo no son concluyentes.

Todo ello acompañado con la toma de medicación, falta de ejercicio lleva al niño a un terreno intoxicado, en el cual se altera las función celular y crea sustancias dañinas para el organismo y provoca apatía, cansancio, falta concentración y además esta situación puede verse agravada por el consumo de alcohol y tabaco.

Lactancia materna y ácidos grasos omega 3:

La leche materna contiene ácidos grasos poliinsaturados (EPA y DHA) ausentes en las leches maternizadas y necesario para la maduración del sistema nervioso inmunitario del niño. Su carencia o presencia bajo forma trans puede conllevar a numerosos trastornos ( Dr. Jacques Edouart Poncet, pediatra de Lyon,) Por orden de importancia son:

1. Manifestaciones alérgicas
2. Problemas inmunitarios (ORL)
3. Desarrollo incorrecto de la retina
4. Hiperactividad
5. Dificultad de aprendizaje escolar
6. Déficit de comportamiento y trastornos emotivos
7. Obesidad.

Merece la pena tomar en consideración la suplementación con DHA y EPA derivados del ácido alfa linolénico en niños con trastornos de aprendizaje e hiperactividad que no han recibido lactancia materna, dado que presentan niveles más bajos en sangre y además son nutrientes imprescindibles en la función cerebral, especialmente en su desarrollo (“The Nutrition Practitioner”, en The ONC Journal, vol. 2, julio de 2000).

Ácidos grasos esenciales , omega 3 : han obtenido reconocimiento a nivel mundial y disciplinar, hoy en día la gran mayoría de profesionales de la salud coinciden en aceptar los extraordinarios efectos favorables que tiene el aporte de este suplemento en patologías del sistema nervioso especialmente en niños con TDHA , sobretodo en su forma DHA , ya que mejora considerablemente sus niveles de concentración.

Es importante tener presente que intentar obtener cantidades óptimas de ácidos grasos omega 3, exclusivamente de la dieta, es una tarea casi imposible dada su extrema fragilidad. Calor, luz, oxidación, las frituras, las radiaciones, el consumo elevado de grasas saturadas como mantequilla, cremas, lácteos, que hace que baje la cantidad de grasas buenas ,el consumo excesivo de carbohidratos refinados ....son causas que imposibilitan que el organismo obtenga las dosis óptimas de omega 3 (Colastra , 2010) Es uno de los ejemplos más claros de la necesidad de utilizar complejos nutricionales .

Subcarencias de nutrientes:

Niacina-niacinamida (B3): Muchos pacientes con TDHA tienen bajos niveles de serotonina y la suplementación con vitamina B3 precursora de serotonina sería muy beneficioso “The Nutrition Practitioner "

La vit B3 es clave en la producción de energía, función cerebral, salud de la piel y equilibrio metabólico de la glucemia (azúcar en sangre ) se ve muy perjudicada con la cocción larga de los alimentos .

Fuentes: carnes, pescados primordialmente azul( atún, sardinas, boquerón, caballa ,salmón ),cereales ( arroz integral ) legumbres (soja y lentejas ) , frutas secos ( almendras, avellanas, piñones) verduras ( champiñones guisantes ) brotes de alfalfa, algas nori y kombu , levadura fresca de cerveza, germen de trigo y salvado de trigo .

Piridoxina B6: Se ha demostrado que en niños con niveles bajos de serotonina, la vitamina B6 reduce las manifestaciones del TDHA, no es de extrañar, ya que la B6 es necesaria para conversión del triptófano dietético en serotonina y a menudo aparece como deficiente en las personas con niveles bajo en este neurotransmisor. “The Nutrition Practitioner ”.

Es una de las vitaminas involucradas en el mayor número de reacciones y funciones del organismo , interviene en la síntesis de neurotransmisores y ayuda a la salud general del sistema nervioso, actúa contra la depresión y ayuda contra el síndrome premenstrual .

Fuentes : Cereales ( copos de avena, arroz, trigo integral) frutos secos ( nueces ) frutas ( plátano y aguacate ) legumbres, alfalfa terminada, germen de trigo, salvado de trigo .

Balance zinc/cobre: En pacientes con TDHA los niveles de cobre se encuentran elevados y los de zinc bajos, los niveles elevados del primero afectan negativamente al metabolismo del triptófano precursor de serotonina y niveles elevados de cobre son antagonistas del zinc, y la deficiencia de este mineral hace que los niños se muestren irritables, malhumorados y huraños, en estos momentos la suplementación con zinc se hay altamente recomendada “("The Nutrition Practitioner", en The ONC Journal,vol.2, julio de 2000) Además el Zn ayuda a combatir los altos niveles de plomo y cobre.

Anemia ferropénica, hierro, y trastornos de aprendizaje y concentración: En un estudios con 78 niños con anemia ferropénica y 41 niño sin anemia, que recibieron aleatoriamente hierro o placebo, al cabo de 3 meses se observó un incremento sustancial en la hemoglobina, el hematocrito y la saturación de transferrina entre los niños con anemia ferropénica. Aunque la diferencia en las puntuaciones de las pruebas entre los niños anémicos tratados con hierro y los niños no anémicos, no era todavía estadísticamente significativa, cuando se introdujeron los valores iniciales como covariante, los niños anémicos ferropénicos que fueron tratados con hierro obtuvieron puntuaciones de logros significativamente más altas, lo que indica que la suplementación con hierro en estos niños favorece los procesos de aprendizaje. (A. G. Soemantri, E. , Pollitt e I. Kim, “Iron deficiency anemia and educational achievement”, Am, J. Clin, Nutr., vol. 42, nº 6, 1995, págs. 1221-1.228.)

Multivitamínico mineral: El estudio de (D. Benton y J. P. Buts, “Vitamin/mineral supplementation and intelligence. Letter”. En Lancet, nº 1, 1990, págs. 1.158- 1.159.) indica que una dieta baja en nutrientes y vitaminas se relaciona con una mala actitud y una falta de atención y que son los niños con una mala dieta los que se pueden beneficiar especialmente de un suplemento vitamínico- mineral, sobretodo rico en magnesio que es un relajante natural del sistema nervioso y muscular.

Dieta para niños con TDHA

PROCURE QUÉ SUS HIJOS COMAN

• En época de lactancia cuando no se pueda dar la lactancia materna, añadir a la leche maternizada o a la leche vegetal adaptada aceite Omega 3 de calidad.
• Incorporar como hábito normal diario el consumo de semillas ricas en AGPI de las dos familias Omega 6 y Omega 3, imprescindibles para la salud de las membranas neuronales. (semillas de sésamo, lino, girasol, calabaza, frutos secos ….)
  También utilizar aceites de primera presión en frío, de girasol, sésamo, lino, nuez, además del de oliva en el aliño de las ensaladas ,cereales y verduras.
• Incorporar cereales completos, arroz integral, trigo sarraceno, mijo, quínoa, para mantener más estables los niveles de azúcar en sangre.
• Alimentos ricos en Magnesio como vegetales de hoja verde, la lechuga contiene principios químicos naturales que ayudan a la relajación.
• Alimentos ricos en Zn como semillas de calabaza, semillas de lino, pescado, carne, cereales integrales y legumbres.
• Alimentos ricos en hierro como almejas, berberechos, hígado, paté de hígado de cerdo, mejillones, anchoas, jamón ibérico, sardinas en aceite, solomillo de vacuno, jamón dulce o de muslo de pavo.
• Pescados azules ricos en omega 3, sobretodo los pequeños para que no tengan mercurio, boquerón , sardina, caballa.

EJEMPLO de DIETOTERAPIA

• Desayuno rico en proteínas y sin azúcares rápidos ejem: batidos de proteína vegetal de guisante o de suero de leche sin caseina con leche de arroz o de avena o leche vegetal y copos de avena y almendras crudas si se toleran, o yogur o medir con copos de avena, semillas, almendras y fruta troceada todo bien mezclado y endulzar si es necesario con sirope de agave en vez de azúcar o edulcorantes artificiales.
• A media mañana pan de levadura madre de cereales completos y enriquecido con semillas , con paté vegetal tipo humus o tahin o aceitunas , o con aceite oliva primera presión y pavo o tortilla o jamón ibérico.
• La comida debe empezar con vegetales crudos o cocidos seguido de cereales completos con un poco de legumbres o pescado de calidad o carne blanca de calidad.
  Ensalada de canónigo con puntas de espárragos, zanahoria o remolacha ,semillas, aguacate un par de nueces, sardinas o atún aliñado con aceite de girasol o oliva de primera presión o verduras cocidas ,alcachofas, cardo, borraja, judía verde, brócoli...
  De segundo plato pescado que no sea de piscifactoria ,ternera de calidad ,pavo o pollo bio acompañado de arroz integral con tomate casero o pasta integral o legumbres.
  
  La merienda puede ser leche de avena o de arroz con 2 dosis de batido de cacao de proteína vegetal y acompañada de alguna fruta o galletas de avena o pan de centeno con aceite de oliva y algo de proteína o yogur natural o medir con fruta fresca, frutos secos sin tostar.
• La cena debe tener como base glúcidos completos integrales y con un poco de proteína. Por ejemplo primer plato crema de verduras o ensalada verde y de segundo arroz integral o lentejas o quinoa incorporar siempre semillas y aceite de primera presión y acompañar con tortilla francesa o algo de pescado.
• La fruta que sea tolerada (tantear las tolerancias) debe ser tomada como aperitivo entre horas y en abundancia, ya que es una buena fuente de vitaminas y minerales que son necesarios para estabilizar el comportamiento y el humor.
• Otros excelentes tentempiés son las galletas de avena con mantequilla de frutos secos sino se es alérgico, la fruta deshidratada , o palitos de zanahoria o de pipas acompañado de puré de garbanzos humus o guacamole.
• Líquidos : entre comidas trataremos de que beban agua mineral o zumos naturales y que eviten café, zumos envasados y gaseosas .

Evitar:

• Los azucares ( bollería industrial, zumos azucarados, chucherías).
• Los lácteos de vaca.
• Los aditivos alimentarios( colorantes, conservantes )
• Los alimentos muy procesados, comida rápida .
• El chocolate.
• Los huevos.
• Las levaduras.
• La soja.
• Maíz.
• Tener precaución con cebada y centeno.
• Tantear tolerancia a cítricos, uvas, bayas.
• Los hidratos de carbono refinados (blancos).
• La cafeína, el te negro, bebidas tipo colas .
• Sulfitos que se usan como conservantes de los frutos secos por eso deben ser orgánicos .

Suplementación:

• Complejo B adaptado a la edad.
• Omega 3 (rico en EPA y DHA).
• Omega 6.
• Aporte adicional de B3, B6 + Magnesio.
• Zinc.
• Cóctel de oligoelementos
• Hierro si existe anemia ferropénica.
• Complejos multivitaminos y minerales si los hábitos alimentarios no son los ideales o se sospecha la existencia de sus carencias.
• Moléculas azufradas si existe intoxicación por metales pesados.

En cuanto a la suplementarios es aconsejable asesoramiento profesional.

CONSEJOS PRÁCTICOS

Las comidas poco abundantes y regulares y los tentempiés son preferibles a las comidas abundantes, que elevan más los niveles de azúcar en sangre.

Busque las intolerancias alimentarias que en los niños están muy relacionadas como ya hemos visto con los trastornos de la conducta. Eso se debe a que el consumo de alimentos a los cuales mostramos intolerancia estimula la liberación de endocrinas, sustancia química del cerebro que producen bienestar ,a las que El Niño se vuelve activo y provoca esa ansia de alimentos nocivos.

La identificación de las intolerancias alimentarias puede hacerse mediante análisis de sangre o eliminando durante un tiempo los alimentos sospechosos y observar que ocurre en 24-48 h al volver a introducirlos.

Haga análisis de minerales del cabello, que le permitirá poner de relieve la presencia de metales tóxicos o la carencia de nutrientes . El cobre , el plomo y el mercurio en exceso están implicados en el TDHA y elevados niveles de fósforo y bajos niveles de magnesio también son un problema .

Es necesario estimulara al niño para que cada día hagan algo de ejercicio para bajar adrenalina e ir introduciéndoles en técnicas de relajación tipo yoga taichi o meditación.

De a su hijo masajes con aceite esencial de lavanda mezclado con su crema habitual o poner unas gotas del mismo aceite en el agua del baño o en el gel de baño.